Después del raid Portalegre me he sentado a pensar un poco en mis puntos débiles, que tengo muchos, a la hora de ir en moto. A lo largo del tiempo siempre he sabido que la técnica no es mi fuerte en la moto, cuando me enfrento a tramos endureros o muy lentos entre piedras en los que el uso del embrague, gas y freno se hace mas importante que la velocidad pura, noto que no tengo la técnica necesaria para hacer uno de estos tramos con seguridad y soltura.
Para trabajar sobre esta técnica he recurrido a LOS AMIGOS que saben mucho mas que yo de estos temas, pero no a esos amigos que siempre presumen de subir por trialeras imposibles, esos no valen, lo que tenéis que buscar es a ese amigo que sabe mucho mas que tu y además QUIERE ENSEÑARTE.
Yo concretamente he recurrido a Pepe, granadino, experto trialero del que colgare alguna foto y Cristóbal Cortes, vecino de Fuengirola con el que he empezado a salir los fines de semana a entrenar enduro.
El trabajo con Pepe, al que da gusto ver como maneja una enduro como si fuese una de trial, se ha centrado en aprender a manejar la 530 como si fuese una moto de “trial”. Tengo que aprender a usar el embrague en su justa medida, ya que la tendencia que tengo es a subir las pendientes rapido y dando gas y claro, cuando se acaba la subida no llego a dominar la inercia como se debe. Para trabajar esta técnica he buscado zonas pequeñas pero con mucha pendiente, donde puedes hacer muchas prácticas diferentes a poca velocidad, de hecho estuvimos una hora practicando el hacer un 8 entre dos pinos en medio de una subida con al menos 50 grados de pendiente.
Salgo casi todos los días 2 h a practicar esta tecnica, ya os digo, no se trata de subir grandes trialeras ni saltar de piedra en piedra, se trata de aprender a manejar la moto en tramos muy lentos y subir o bajar de forma controlada por donde nunca me he atrevido a hacerlo.
La practica diaria la verdad es que funciona, por zonas donde antes ponía el pie en el suelo constantemente, ahora paso sin dificultad y sobre todo haciendo que la moto entre por donde yo quiero y no por donde a ella la da la gana.
Mi amigo/entrenador Cristobal |
Para el enduro he recurrido a Cristóbal, salimos los dominguitos a hacer enduro, eso si es verdad que me impresiona. Estas motos son capaces de pasar por sitios increíbles, yo estoy acostumbrado a ir rapido por pistas no demasiado complicadas con lo que subir por donde aparentemente no subiría una cabra es todo un reto.
No para de explicarme trucos y animarme a subir, o a regañarme sin compasión de vez en cuando, el resultado es que he vencido el miedo inicial que siempre he tenido a estas subidas.
Ahora como resultado de estas practicas, disfruto muchisimo subiendo o bajando por estas laderas o pendiente y me levanto todos los días con unas ganas impresionantes de coger la moto.
Una recomendación muy importante para que día a día no te canses, es conseguir pequeñísimos retos todos los días, ya sea subir la cuesta que nunca pudiste, pasar por ese pedregal en el que no paras de poner los pies en el suelo o bajar muy muy despacio una pendiente para coger tacto con los frenos, tienes que volver a casa con la sensación de que has aprendido algo que ayer no sabias.
He ajustado las suspensiones lo mas flojas que se pueden tanto delante como detrás aflojando los reglajes como indica el manual de la moto, excepto los muelles que no he tocado, he montado unos purgadores de aire en la horquilla que funcionan extraordinariamente bien, y el resultado ha sido impresionante. Ya no noto esos rebotes de la horquilla que parecía rígida.